Semanario Digital El Jornalero

Enrique Peña Nieto (PRI)        Y     Andres Manuel Lopez Obrador (MORENA)

  El choque desde hace tiempo se ve venir, por más que las grandes cadenas televisivas (y las micros como Milenio también) y grupos de poder tienen años enterrando a López Obrador, reviviendo a Cárdenas y tratando de hacer crecer a Ebrard.

            Él debe ser nuestro candidato, porque en la oposición no hay hoy un político más conocido y más preparado para enfrentar al sistema y no hay ninguna encuesta que permita ver a alguien más como capaz de enfrentar a Enrique Peña Nieto, la nueva creatura de los grandes intereses económicos y políticos del país. 

            De éste se sabe más de sus viajes y su vida social que de su proyecto político. Sus viajes al Vaticano o a Brasil, a saludar y posar con Lula, han ocupado más espacio que sus planteamientos, que son opuestos a los de López Obrador. Destaco algunas diferencias:

1.- En general el proyecto de Peña Nieto está oculto; el de AMLO, denominado Proyecto Alternativo de Nación, se debatió en todo el país. El documento base de éste lo elaboraron 25 de los más importantes intelectuales de México y fue mejorado en foros municipales y estatales.

2.- Peña Nieto está a favor de la apertura de PEMEX al capital privado, incluyendo el extranjero. López Obrador dio una importante lucha en contra.

3.- Peña Nieto coincide con Calderón en una sola policía en cada entidad federativa, bajo el mando del Gobernador. López Obrador plantea fortalecer a los Municipios y fijar reglas de coordinación entre Federación, estados y municipios en la materia.

4.- Peña Nieto acepta una alianza con el PANAL, Obrador veta a ese partido, como también al PRI y al PAN como aliados electorales.

5.- Peña Nieto prometió reformar la legislación electoral a favor de las televisoras; Obrador (y el PRD) fue quien impulsó el sentido de la ley actual, para impedir otra guerra sucia contra un candidato en el futuro, como la que se vivió en el 2006.

6.- Peña Nieta obligó a los diputados del PRI a vetar la figura de la “revocación del mandato” en la reforma política aprobada en el Senado. AMLO se sometió a consultas masivas de revocación de mandato cada dos años, cuando fue Jefe de Gobierno del DF.

7.- La alianza PANAL-PRI reeditará el contubernio con el SNTE, que ha dejado desde con Salinas (incluyendo Fox y Calderón) la educación pública en manos del sindicato más corrupto de México. Con López Obrador se rescataría el control de la educación.

8.- Las figuras más conocidas en torno a Peña Nieto son Carlos Salinas, Elba Esther Gordillo, el “niño verde” y tal vez Diego Fernández de Ceballos y el mismo Vicente Fox, además de Paty Chapoy, Carlos Loret de Mola, Carlos Marín, Pedro Ferrís de Con y los dirigentes políticos del PRI. Con López Obrador, además de los líderes del PRD, PT y Convergencia, están Elena Poniatowsca, Julio Sherer, Genaro Góngora Pimentel, Juventino V Castro, Raquel Tibol, René Druker Colín, Lorenzo Meyer, Arnaldo Córdova, Paco Ignacio Taibo, Pablo González Casanova, Adolfo Gilly, Octavio Rodríguez Araujo y Ricardo Rocha.

9.- Lo más importante de un político es su propuesta y a que intereses responden, ésta y él. El de López Obrador es el mejor programa que se haya hecho en décadas en nuestro país, porque es obra de cientos, quizá miles, de mexicanos que aportaron al de suyo gran proyecto elaborado por 25 de los más destacados intelectuales de México. El PRI y el PAN no cuentan con un grupo grande de intelectuales afines y mucho menos les darían libertad a éstos para que elaboraran su programa de gobierno.

10.- Peña Nieto nada ha dicho de cobrarle impuestos a trasnacionales, a la Casa de Bolsa y a las más grandes empresas nacionales, que no pagan impuestos (Televisa, Tvazteca, Bimbo, Cemex, Jumex, Jugos del Valle y Oxxo, entre otros); Calderón se atrevió a denunciar tal situación; López Obrador promete cobrarles, como a cualquier otra empresa.

            No es con ataques personales, descalificaciones y miedo como debemos conducirnos en el 2012. Esa es la vieja fórmula de la derecha para combatir las ideas. La usaron contra Allende en Chile, contra Lula en Brasil, contra Hugo Chávez en Venezuela, contra Evo en Bolivia, contra Ollanta Humala en Perú, desde luego contra López Obrador en 2006 y hasta contra Obama en 2008 en Estados Unidos. Sólo en México les dio resultados, pero no nada más las escuelas educan y hoy, a través de Internet, la comunicación alternativa, al margen de los grandes medios controlados, es una realidad.