"Denme un tiro, mátenme aquí" fue el grito que irrumpió en el
silencio de las instalaciones militares de la colonia 70-76 en Tijuana.
El manifestante tomó su playera negra con un esqueleto en el pecho, se
cubrió el rostro y continuó con gritos para exclamar que era inocente.
»Los liberan y los vuelven a culpar de "narcos"
De
inmediato elementos del Ejército se acercaron a someter al inconforme,
quien en el forcejeo jaló un arma larga y continuó pidiendo que lo
mataran en el lugar.
El manifestante, Luis Armando Chávez Flores, ex agente de la policía
municipal, detenido en septiembre del año pasado por sus presuntos
vínculos con el crimen organizado, pero liberado en diciembre por la
falta de pruebas, fue sometido y sacado de las tres filas donde estaban
reunidos otros 61 policías y ex policías acusados de delincuencia
organizada.
Pero el silencio fue roto de inmediato. "Chinga tu madre De la Rosa.
Yo fui fiel, Rommel, fui fiel, hasta el final. No tengo verguenza de
nada", exclamó un agente ministerial que de inmediato comenzó a temblar y
a llorar, tras el reclamo al secretario de Seguridad Pública del
Estado, Daniel de la Rosa, que estaba en el lugar.
Las protestas surgieron como avalancha, la mayoría de los 40 policías
municipales comenzaron a decir que estaban de manera voluntaria y que
los jefes policiacos los engañaron porque los citaron a un curso al
Centro Estatal de Capacitación.
Por su parte, los policías ministeriales insistieron que sus capturas
son una cortina de humo tras la detención de Jesús Quiñonez, encargado
de Enlace de la Procuraduría del Estado con las autoridades
estadounidenses.
Cuentan con órdenes de aprehensión
En la presentación de los presuntos delincuentes, el titular de la
Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Rommel Moreno
Manjarrez, informó que los policías y ex policías fueron detenidos en
cumplimiento en órdenes de aprehensión y no en calidad de arraigados u
otras medidas cautelares.
Detalló que las investigaciones en contra de los policías municipales
y ministeriales son de 1 año, 1 año y medio y hasta 2 años, y no están
relacionadas con la detención del encargado de Enlace de la
Procuraduría, Jesús Quiñonez.
Cuestionado sobre a qué grupo delictivo pertenecían los ahora detenidos, Moreno Manjarrez evadió responder.
Añadió que las detenciones de los 16 policías ministeriales, 40
municipales y 6 ex municipales se realizaron en apego al respeto de los
derechos humanos.
En los operativos para detener a los agentes y ex agentes también participó el Ejército mexicano.